RESUMEN DE LA MEMORIA:

La orientación, las vistas y la topografía condicionan la idea general de la vivienda.
Surge un planteamiento bipolar, ya que las vistas del Cantábrico se sitúan al norte y el soleamiento en el arco este- sur- oeste. Esta dualidad se refleja en las plantas en las que las áreas norte y sur se conectan por un «elemento-puente» que discurre a través de dos patios uno interior y otro exterior. Esta idea se refleja en la geometría en H de las plantas baja y primera. En el patio interior se ubica el comedor, creando un espacio a doble altura, el patio exterior rompe la rotundidad volumétrica y es visible desde la entrada creando un juego dentro-fuera que se repite en todo el proyecto.
La topografía del terreno en pendiente descendente hacia el norte, hacia el mar, permite jugar con los niveles y enfatizar la atracción del volumen por el cantábrico, prolongando sus aleros que se transforman en terrazas.
La presencia del agua, sus reflejos y el color azul es una característica de toda la obra.
La vivienda se concibe como una pieza única, piedra, vidrio y madera definen sus planos, es una caja de luz en la que el espacio exterior y el interior se entremezclan. Arquitectura e interiorismo dialogan y se funden buscando una casa contemporánea y funcional.